Tarta de manzana súper fina, súper fácil, súper buena
En un restaurante gallego al que solía acudir con unos amigos, tomábamos siempre de postre la tarta de manzana súper fina que debías encargar al principio de la comanda para que te la pudiesen servir recién hecha. Desde entonces la preparaba a mi manera, aunque notaba que algo se me escapaba. y mira tú por donde, a Marisa de Retceteras le pasaba lo mismo con otra tarta similiar y después de varios intentos encontró el punto que buscaba. Si conocéis a Marisa sabréis que en su blog encontramos platos buenísimos y recetas que siempre salen. Si no la conocéis ya estáis tardando en pasar por su blog para no perderos nada de nada. Yo no me lo pensé dos veces porque todos los ingredientes los tenía a mano y enseguida me puse a preparar la tarta.
Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre
- 3 manzanas golden
- 3 cucharadas de azúcar moreno
- 2 cucharaditas de canela en polvo
- 1 cuchcarada de azúcar blanco
- 2 cucharadas de agua
- 1 cucharada de zumo de limón
- 3 cucharadas de mermelada de melocotón
Elaboración:
Pelamos una de las manzanas y la picamos en trozos pequeños. Ponemos los trozos en un bol y añadimos una cucharada de azúcar moreno, una cucharada de agua, una cucharada de zumo de limón y una cucharadita de canela. Mezclamos bien, tapamos con film de cocina y metemos en el microondas 3 minutos a 800 W.
Reiramos el film con cuidado para no quemarnos con los vapores y trituramos con la batidora de brazo. Reservamos. Este paso es el que me faltaba a mi cuando intentaba reproducir la tarta, preparar una cremita de manzana de relleno.
Extendemos el hojaldre con un rodillo y sobre una lámina de papel de horno. Nos vale el papel de horno que trae el propio hojaldre. Rociamos el azúcar blanco por toda la superficie, ponemos otro papel de horno por encima y pasamos el rodillo para que el azúcar se integre en la masa. Doblamos los bordes de la masa un poco hacia arriba, haciendo un pequeño rulo para que el relleno no se salga y pinchamos toda la superficie con un tenedor para que no se infle la masa y metemos un rato al frigorífico.
Pelamos y descorazonamos el resto de las manzanas y las cortamos en gajos finos. Colocamos el relleno por toda la superficie, tiene que ser una capa fina, y vamos colocando por encima de la tarta los gajos de manzana, empezando por el borde y dirigíendonos al centro haciendo círculos. Los gajos de manzana los ponemos todos en la misma dirección. Mezclamos dos cucharadas de azúcar moreno con una cuharadita de canela y espolvoreamos por toda la superficie. Metemos de nuevo al frigorífico.
Precalentamos el horno a 200º y hornamos durante 20 minutos. ¡Ojo! vamos vigilando que ya sabéis que cada horno se comporta de una manera diferente. Mientras diluimos la mermelada con una cucharada de agua y la ponemos 30 segundos en el microondas. Marisa la cuela para que no haya tropezones, pero a mi los tropezones me gustan, que le voy a hacer. Pincelamos la superficie de la tarta, la dejamos templar diez minutos y servimos.
La tarta si la dejamos enfríar está buenísima, pero a mi esta tarta me gusta templada, como la servían en el restaurante que os comentaba al principio.
Bon appétit