"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

Crema de espinacas y almendras


Espinacas, muchas metes y pocas sacas. Esta frase se la oía a mi madre cada vez que preparaba espinacas. Y yo miraba con horror la enorme cantidad que veía en la olla, y rezaba para que se redujesen tanto que sólo sacase un plato para ella y otro para mi padre.


Si, cuando era pequeña odiaba a muerte las espinacas, por mucho que Popeye nos incitase a comerlas cada día. Las estuve odiando hasta que un día las comí en crema y me cautivaron hasta la fechas. ¡Me encantan! me gusta comerlas crudas en ensalada, templadas, en croquetas, en tortilla, cocidas, pero sobre todo, como más me siguen gustando son en crema. Por eso cuando Neus, que es la encargada este mes de recibir al famoso recetario, nos propuso para el reto de Tía Alía la receta salada y ví la crema de espinacas, tardé muy poco en decidirme. Por eso, y que como estoy a dieta procuro no hacer comidas dulces, je, je


La receta de Tía Alía no es la que yo hago habitualmente, y aunque no me gusta modificar mucho la receta original (lo que me gusta del reto es descifrar la receta), en esta ocasión lo he tenido que hacer por varios motivos: No puedo tomar leche de vaca, no puedo tomar harina con gluten y no puedo tomar mantequilla. Todo esto es por la dieta que estoy siguiendo, así que me ha tocado sustituir esos elementos ;)



Ingredientes:

  • 300 gr. de hojas de espinacas lavadas
  • 3/4 de litro de leche de almendras
  • 50 gr. de maizena.
  • 50 gr. de aceite de oliva
  • Sal
  • 1 huevo
  • 4-5 almendras por comensal


Elaboración:

He preparado la crema en la Thermomix, pero como siempre os digo como hacerla de forma tradicional. Además la mayoría de las veces la hago de esta última manera. Ponemos en el vaso el aceite y programamos 100º de temperatura 7 minutos a velocidad 2. A los dos minutos aproximadamente empezamos a introducir las hojas de espinacas por el bocal de la tapa.
Podemos poner a cocer las espinacas en una cacerola con un poco de agua, no mucha porque el caldo lo vamos a tener que tirar.


Añadimos la leche de almendras, la sal y la maizena y programamos 100º de temperatura durante 15 minutos a velocidad 4.
Batimos con un robot o la batidora de vaso las espinacas hasta hacer un puré. Reservamos. En una sartén ponemos el aceite junto con la maizena, lo rehogamos un minuto y vamos echando despacito un poco de la leche de almendras, sin parar de mover añadimos el puré de espinacas y seguimos añadiendo la leche y seguimos moviendo (lo siento, pero si queremos que nos quede una crema fina no se puede parar de mover) añadimos sal al gusto.


Por último añadimos el huevo, si lo hacemos en la Thermomix lo echamos y programamos, ya sin temperatura, 3 minutos a velocidad 5. 
En la sartén añadimos el huevo previamente batido, y lo incorporamos sin dejar de mover hasta que tengamos la textura de crema lista.


Servimos con unas almendras crudas por encima.


Y ahora me voy a ver lo que han publicado los demás participantes del reto.

Bon appétit
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