"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

Marmitako de bonito



El marmitako de bonito también llamado sorropotún o marmita en Cantabria, es un plato basado en el atún blanco o bonito del norte, su origen se encuentra en los barcos de pesca vascos y cántabros, sus cocineros antiguamente utilizaban mucho este pescado, por su abundancia y con pimientos y patatas que siempre había en sus despensas, preparaban este guiso en las marmitas, cazuelas de barro, que se usaban antes para guisar.

Un plato muy completo, la proteína del pescado azul, los hidratos de carbono de la patata y las vitaminas y otros nutrientes antioxidantes de la verdura proporcionan a este plato un 10 en cuanto a las necesidades diarias de alimentación de una persona por lo que era ideal para los marineros que pasaban largas jornadas en la mar bajo el sol y en las condiciones no mas adecuadas.
El punto de este plato se lo da el caldo de pescado, debe de ser de la espina del propio bonito, un caldo potente que es la clave además del picante que aporta la cayena para obtener el marmitako perfecto.
Podemos sacarle incluso mas punta si el vino que usamos es un buen Txakoli y si además lo saboreamos en un día frío como el de hoy disfrutaremos este plato en todo su esplendor.


Ingredientes para 6 personas:
- 1 pimiento rojo pequeño
- 1 pimiento verde pequeño
- 1 cebolleta
- 3 dientes de ajo
- 1 cayena
- 1 tomate maduro
- 120 gr. de tomate frito
- 3 cucharadas de carne de pimiento choricero
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 5 patatas medianas
- 500 gr. de bonito
- 200 ml. de vino blanco
- Perejil picado
- Sal y aceite
- 3/4 l. de caldo de pescado



Preparación:

Lo primero que hacemos es el caldo de pescado.
En una cazuela con 3/4 l. de agua cocemos las espinas del bonito con una cebolla cortada en cuartos, 3 hojas de laurel y un poquito de sal.
Colamos en un chino para evitar todas las espinas y que nos quede un caldo fino.
Reservamos.


En una cazuela amplia comenzamos haciendo un sofrito con la cebolleta, los pimientos y los ajos bien picados, rehogamos durante 5 minutos removiendo de vez en cuando.


Cascamos las patatas y las añadimos rehogando otros 5 minutos.


Añadimos el tomate picado y sin piel, el tomate frito, la carne de los choriceros, la cayena y el pimentón y removemos un par de minutos para que se fijen los sabores.


Añadimos el vino y el caldo de pescado y dejamos cocer hasta que la patata esté tierna, al menos 25 minutos con la cazuela tapada.


Salamos y sellamos el bonito en una sartén con un poquito de aceite.


Incorporamos el bonito a la cazuela, removemos con cuidado, corregimos de sal si fuera necesario, añadimos el perejil, apagamos el fuego, tapamos y dejamos reposar 10 minutos, el bonito terminará de hacerse con el calor residual, quedará mucho mas jugoso y nada seco y el reposo le hará al guiso mucho mas sabroso.


Servir bien caliente.





Receta inspirada en la del mismísimo Martín Berasategui. Imprime esta receta