Salchichas blancas con patatas al limón
Qué tendrán los frutos del campo, los que coges con tus propias manos, los que ves colgados del árbol en lugar de en una caja en el súper, para que sepan mejor, tengan mejor color y sobre todo nos motiven tanto para cocinar.
Este fue el caso de unos limones que cogimos del limonero de mi cuñada un fin de semana soleado de este invierno para quitarle peso a unas ramas que colgaban pesarosas cargadas de limones hermosisimos y que con la luz del sol ofrecían una foto espectacular... ¿os lo creéis? pues no, no le hice foto cachiiiisss....
¡¡Estaba deseando llegar a casa para cocinar con ellos!! y estas salchichas blancas con patatas al limón fueron la receta elegida.
Me acordé entonces de este plato sencillo que hacía mucho una tia mía y que a mi hermano y a mi nos encantaba por el contraste de sabores y sobre todo por el aroma que se extendía por toda la casa tan fresco a limón.
No se muy bien si era exactamente esta receta porque lógicamente no la tengo escrita, he ido improvisando, pero por lo que me he podido ir acordando y el resultado la verdad es que se le parecía bastante.
Ingredientes para 4 personas:
- 600 gr. de salchicha blanca
- 6 patatas medianas
- 1 cebolla grande
- 1 limón
- 5 hojas de laurel
- 1 diente de ajo
- perejil fresco picado
- 250 ml. de vino blanco
- 250 ml. de agua o caldo de carne
- AOVE y sal
Preparación:
En una cazuela amplia marcamos las salchichas en un chorro de aceite hasta dorar.
Apartamos y reservamos.
En el mismo aceite, añadiremos mas si fuera necesario, pochamos la cebolla cortada en juliana fina junto con el laurel y unas cáscaras de piel de limón (sin lo blanco)
Añadimos el vino y dejamos cocer un par de minutos.
Incorporamos las patatas cortadas en lascas de tamaño mediano, regamos con el zumo de limón, salamos, removemos y cocemos un minuto para que coja los sabores.
Incorporamos las salchichas, añadimos un majado de ajo y perejil, rectificamos de sal, añadimos el agua o el caldo de carne y dejamos cocer a fuego suave, removiendo de vez en cuando, hasta que las patatas estén tiernas, al menos 40 minutos, las pincharemos con un tenedor para comprobar.
Servir bien caliente.
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