Tarta Red Velvet para Navidad
La tarta red velvet es una opción ideal como postre final de la comida de Navidad, además si la decoramos con mucha nata a modo de nieve y le ponemos unos adornos navideños nos quedará de lujo.
Elena ya ha hecho tres tartas red velvet así que es una experta:
Red Velvet Cake (Tarta terciopelo rojo)
Como habéis podido comprobar cada cual mas rica y original, a imaginación no nos gana nadie, pero faltaba yo por estrenarme, tenía muchas ganas y las navidades pasadas me animé, el resultado todo un éxito y la he tenido guardada hasta este año para enseñarosla como idea para estas fiestas.
Yo lo mas seguro es que repita también porque gustó muchisimo aunque tengo tantas tartas estupendas por hacer en la recámara que no se al final por lo que me decidiré.
Ya os digo, una tarta deliciosa y muy llamativa y con los colores de la Navidad ¿Ideal no?
Ingredientes para el bizcocho:
- 300 gr. de azúcar
- 3 cucharadas de cacao en polvo
- 4 huevos
- 1 natilla de vainilla
- Extracto de vainilla
- Colorante alimentario rojo
- 1 cucharadita de bicarbonato o gasificante
- 1 cucharada de vinagre de vino blanco
- 2 cucharaditas de levadura en polvo
- 500 gr. de queso crema frío (no light)
- 125 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- 300 gr. de azúcar glas
- Esencia de limón
Preparación:
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta espumar, añadimos uno a uno los huevos y batimos de cada vez hasta conseguir una crema fina.
Vertemos en un bol, añadimos la natilla, el colorante rojo (2 cucharaditas) el extracto de vainilla, el vinagre y mezclamos con las varillas de mano hasta homogeneizar completamente.
Reservamos.
Tamizamos el cacao sobre la harina, añadimos la levadura, el bicarbonato y la sal y mezclamos bien.
Vamos tamizando y mezclando poco a poco con las varillas de mano la mezcla de harina y cacao sobre nuestra crema roja, homogeneizamos bien y vertemos sobre un molde engrasado.
Horneamos a 180ºC durante 35 minutos (comprobaremos que está hecho pinchando con un palillo)
Dejamos enfriar completamente y con una lira o un cuchillo largo tipo jamonero cortamos tres capas.
Reservamos.
Preparamos la cobertura de queso mezclando en un robot batidor o varillas eléctricas la mantequilla con el azúcar y el queso hasta conseguir una crema fina y homogénea.
Untamos cada capa de bizcocho y montamos una encima de otra.
Terminamos decorando con gran cantidad de cobertura de queso haciendo ondas emulando nieve.
Culminaremos con decoración navideña al gusto.
Fuentes: elgourmeturbano y marialunarillos