"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

Pan de patata, ajo y romero con masa madre


Buscando por Internet recetas de pan me topé con esta, ¿pan de patata? no lo había oído jamás y por supuesto tenía que hacerlo.

Desde un tiempo a esta parte en casa sólo comemos pan casero, ya no entra ningún pan que sea comprado, suelo hacer el pan básicos cada semana, por supuesto también verano, pero de vez en cuando me gusta innovar y complicarme un poco la vida como en este caso.

Tengo que confesar que tuve que hacerlo dos veces, a la primera me salió un mazacote que tuve que tirar y no sé aún muy bien porqué, ya que seguí las instrucciones al pié de la letra, y por arte de magia la segunda vez, haciéndolo exactamente igual salió esta maravilla.

Os lo recomiendo porque os sorprenderá, la textura que le aporta la patata es esponjosa y muy suave y el toque de ajo y el romero ya os podéis imaginar.

Ingredientes:

- 500 gr. de harina de fuerza
- 150 gr. de masa madre 100% hidratación (50 gr. MM+50 gr. agua de frutas+50 gr. harina)
- 205 gr. de agua
- 60 gr. de aceite de oliva virgen extra
- 150 gr. de patata cocida
- 10 gr. de sal
- 3 dientes de ajo
- 1 cucharadita de postre de romero seco o 1 ramita fresca


Preparación:

Comenzamos confitando los ajos enteros, con piel y machados con el romero en una sartén con el aceite.
Cuando empiecen a saltar bajamos el fuego casi al mínimo y mantenemos confitando 15 minutos.
Si podemos controlar la temperatura del aceite a 80ºC sería ideal.

Colamos y dejamos enfriar el aceite completamente.


Aplastamos con un tenedor la patata cocida.
Debe estar muy seca y fría antes de añadirla a la masa.


En un bol amplio o el bol de nuestra amasadora tamizamos la harina, hacemos un agujero en el centro y añadimos la MM, el agua, el aceite, la patata y la sal*.
*La sal la echaremos a un ladito para evitar que tenga contacto directo con la MM.


Amasamos durante 10 minutos, dejamos reposar 5 minutos y volvemos a amasar hasta conseguir una masa elástica, suave y manejable, este tiempo en amasadora es suficiente.
Si lo hacemos a mano quizás necesitemos algún reposo más y alguna tanda mas de amasado.


Colocamos la masa en nuestra mesa de trabajo y dejamos reposar 5 minutos.


Con ayuda de una rasqueta o tocando lo menos posible la masa boleamos.
Metemos en un bol engrasado, tapamos con papel film y un paño y dejamos reposar en un sitio cálido 2 horas.
Yo lo meto en el horno apagado.


Pasadas las 2 horas de levado y una vez la masa haya duplicado su volumen, preparamos nuestro molde donde la masa hará la segunda fermentación y cogerá la forma que le queramos dar.
En este caso usé una ensaladera redonda.

Enharinamos un paño de cocina limpio, espolvoreando poco a poco harina asegurándonos que quede completamente cubierto, desechamos el exceso.
Solo queremos que quede impregnado, no con exceso de harina.

Colocamos el paño dentro de la ensaladera.


Volcamos la masa en la mesa, boleamos de nuevo con una rasqueta o con las manos dándole tensión a la masa, sin tocarla demasiado.


Metemos en el molde con la parte lisa hacia abajo.
Tapamos con las esquinas del paño y metemos en una bolsa de plástico bien cerrada.

La segunda fermentación la haremos lenta, en frío, metemos en la nevera durante 8 horas.


Pasado ese tiempo habrá levado, sin duplicar su volumen.
Dejamos atemperar 30 minutos a temperatura ambiente fuera de la bolsa, solo tapado con el paño.

Precalentamos el horno a máxima potencia.

Volcamos sobre nuestra bandeja de horno cubierta con papel vegetal y levemente enharinada.


Greñamos con tres cortes en la parte superior y horneamos.

Metemos un cuenco con agua hirviendo dentro del horno y horneamos a máxima potencia durante 20 minutos.

Sacamos el cuenco de agua, bajamos la temperatura a 200°C y horneamos 30 minutos mas.

Una vez terminado el horneado dejaremos el pan dentro con la puerta abierta 15 minutos.

Dejamos enfriar completamente sobre una rejilla.










Fuente: Chup chup chup

Imprime esta receta