"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

Helado de arroz con leche y "muerte" de Gélida


Esta receta de helado de arroz con leche fue la última que hice con mi heladera del LIDL.

Tenia la mosca detrás de la oreja, las dos últimas veces que utilicé mi "archiconocida" heladera del Lidl "Gélida", comenzó a hacer cosas raras, ruidos extraños, saltos y a girar con dificultad. 
¿Tendría un Poltergeist?

Tenía dos teorías:
Yo le echaba la culpa a que a lo mejor la combinación de ingredientes no fuera lo suficientemente grasa o no fuera la adecuada para que el motor girara con soltura... mi marido le echaba la culpa a su sospechoso precio, tan sólo 19,99€, sus palabras fueron: 
-Pero por ese precio ¿que te van a dar? pues un juguete de plástico que en cuanto lo usas tres veces se rompe.
Y creo que tenía razón.


Tras seguir en esta ocasión los ingredientes a rajatabla y comprobar que estaba todo perfecto la heladera no aguantó ni 10 minutos... comenzó a saltar mas que nunca y el ruido era ensordecedor, hasta que de repente ... silencio total... había llegado a su fin... y me había dejado el helado a medias...

Esto fué lo que pasó y cómo lo solucioné.

Ingredientes:

-2 vasos grandes de leche
-1 vaso pequeño de arroz
-la misma cantidad de azúcar
-1 brik de nata líquida
-1 yogurt natural
-1 ramita de canela
-2 ralladuras de cáscara de limón







Preparación:
Primero prepararemos un arroz con leche exprés:

Ponemos en la olla exprés la leche, el arroz, el azúcar, la canela y las ralladuras de limón.
Cocemos a fuego vivo hasta que silbe, y a fuego suave 15 minutos.


Una vez listo ponemos en un bol amplio y añadimos la nata, el yogurt y un poquito de canela en polvo, al gusto, removemos bien, dejamos enfriar a temperatura ambiente y metemos a la nevera las 4 horas de reposo necesarias que nos indica en fabricante de la heladera.


Pasado este tiempo ponemos la heladera en marcha y... comienza el principio del fin...


Tan sólo después de 10 minutos de "sufrimiento sonoro" se hizo el silencio... y dejó de funcionar... 


¿Que hago ahora con mi helado?
Pues no pienso dejarlo estropear... había visto como alguno de vosotros hacéis helado sin máquina y recordaba que había que meterlo al congelador y moverlo y removerlo cada 20 ó 30 minutos en un periodo de tiempo de al menos 3 horas.
Y eso hice...


Conseguí salvar mi helado y servirlo así de rico para disfrutar del intenso sabor del arroz con leche bien fresquito.
Os lo recomiendo.



Y os preguntareis... ¿Y que pasó con la máquina?
Pues tan sencillo como que llamé al teléfono de atención al cliente del fabricante y me dijeron, sin pedirme explicaciones, que sin problema me enviarían una nueva máquina en el plazo de 4 semanas... perfecto!

Así que no creáis que se acaban aquí mis creaciones... sólo me tomaré un descanso con los helados, mientras trabajará la de Elena, para seguir ofreciéndoos nuestros helados de los viernes.

2 semanas despues....

Ya tengo mi heladera nueva y muchas ideas para preparar helados, pero todavía no la he estrenado... y como la de Elena también sonaba ya algo rara también pidió una nueva, y boilá, ahora las dos las tenemos nuevas listas para trabajar.
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