"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

Gâteau citron-lavande (pastel de limón y lavanda)



Llevaba mucho tiempo detrás de esos moldes con formas maravillosas, y por fin hace unos días me compré uno. Es el modelo Blossom de Nordic Ware. Al quitarle el cinturón de cartón en el que venía el nombre y las características del mismo, me encontré con una receta en un idioma que no era español por supuesto. La leí y para mi sorpresa la entendí sin tener que recurrir a un diccionario. Me puse contentísima, porque el inglés y yo no nos llevamos demasiado bien. Al seguir leyendo veo otra receta y me doy cuenta que es la misma. ¿Dos veces la misma receta en inglés? pensé yo. Volví de nuevo a leer la primera y vi que el idioma era francés. No sabéis la ilusión que me hizo, porque desde mi etapa escolar no había vuelto a leer nada en ese idioma, y tengo que decir que no se me daba tampoco bien. Así que más feliz que un regaliz dije que esa sería la receta para el estreno de mi molde, y aquí os la traigo, respetando el nombre original. Espero que os guste tanto como a mí.



Ingredientes:

  • 360 gr. de harina
  • 300 gr. de azúcar
  • 240 gr. de mantequilla
  • 4 huevos
  • 2 yogures
  • 2 cucharadas soperas de zumo de limón
  • ralladura de un limón
  • 1 1/2 cucharadita de te de levadura
  • 1 cucharadita de te de bicarbonato
  • 1/4 cucharaduta de te de sal
  • 1 cucharada sopera de lavanda (espliego)
Glaseado:
  • 150 gr. de azúcar glas
  • 3 cucharadas soperas de miel
  • 1 cucharada sopera de zumo de limón

Preparación:

Precalentamos el horno a 165º . Mientras, en un bol tamizamos el harina junto con la levadura, el bicarbonato y la sal y reservamos.


En otro bol de tamaño grande (yo lo he ido haciendo directamente con la Thermomix), batimos la mantequilla y el azúcar durante 2 minutos a velocidad media, hasta obtener una crema ligera (velocidad 3 en la Thermomix).


Añadimos la lavanda y batimos 3 minutos más, teniendo cuidado de mezclar bien, envolvemos la mezcla raspando la parte que se adhiere a las paredes del bol.


Añadimos los huevos de uno en uno, batiendo bien cada uno de ellos para que se mezclen homogéneamente. 


Incorporamos el zumo de limón y reducimos un poco la velocidad del batido para ir incorporando poco a poco la mezcla de harina, intercalando entre medias cada uno de los yogures, es decir: mezcla de harina, un yogur, mezcla de harina, un yogur, mezcla de harina. 


Por último añadimos la ralladura de limón.


Cogemos nuestro molde previamente engrasado y añadimos la mezcla. En un molde de estas características, hay que tener mucho cuidado de no dejarnos ningún rincón sin engrasar para que el desmoldaje sea perfecto. Yo, desde que descubrí el spray desmolante es lo que uso, ya que es muy cómodo, y al ser en spray llega a todos los rincones.


Horneamos a 165º durante 55-60 minutos, ya sabéis que para saber si está listo hay que pinchar en el centro con una brocheta y ver que salga limpia. Cuando esté listo lo dejamos enfríar sobre  una rejilla.


Si lo queremos glaseado, cuando el bizcocho esté frío, batimos la miel líquida junto con el azúcar glas y el zumo de limón, hasta obtener la consistencia adecuada, y vertemos por encima del pastel.


Ahora que soy políglota voy a tener que hacer más "gateau", je, je


Ideal para un desayuno, una merienda o con el café de la noche.



Bon appetit


Imprime esta receta