"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

Magdalenas napolitanas con canela sin harina


De pequeñita mi abuela siempre tenía galletitas Napolitanas en la despensa de su cocina, un armario que se encontraba en el pequeño tendedero que daba a un patio oscuro, que la verdad, siempre olía a las antiguas calderas de carbón.

Mi recuerdo es sobre todo del invierno, tardes en las que a partir de las 6 ya era de noche y que mi madre nos cogía de la mano a mi hermano y a mí y tras coger 3 autobuses, hace años las comunicaciones no eran como ahora, llegábamos desde Leganés a Legazpi con frío y hambrientos.


Leche calentita con este sabor a azúcar y canela y el olor del café recién hecho que removía mi abuelo con ahínco... y nos abalanzábamos sobre el plato generosamente repleto de estas crujientes galletas...

Hacía tanto que no las comía que cuando las vi en el súper no dudé en comprarlas para preparar con ellas estas magdalenas, que aunque un poco "deshinfladas" estaban de miedo, esponjosas y suaves.

Ingredientes:
-200 gr. de galletas Napolitanas
-4 huevos
-50 ml. de leche
-150 ml. de aceite de girasol
-1 sobre de levadura
-ralladura de limón
-150 ml de azúcar ...








... o en mi caso el mejor sustituto, el sirope de Agave que Sunny Vía nos envió para probar con nuestros postres.
Es un azúcar completamente natural extraído de la savia de una planta originaria de México, una alternativa beneficiosa al azúcar blanco, gracias a su alto poder edulcorante, sabor neutro y bajo índice glucémico, con un 30% menos de calorías que el azúcar convencional.



Preparación:

Troceamos bien las galletas primero con las manos y luego migamos con ayuda del palo del mortero.


En un vaso medidor ponemos 150 ml. de sirope de Agave junto con los 4 huevos y batimos con las varillas hasta duplicar el volumen y blanquear, vertemos en un bol amplio.


Mezclamos con la leche, el aceite y la ralladura de limón.


Añadimos la levadura y el picadillo de galletas, mezclamos bien y dejamos reposar unos 15 minutos.


Repartimos la mezcla en las cápsulas llenándolas un tercio de la capacidad, esparcimos un poquito de azúcar y espolvoreamos con canela molida.


Horneamos 20 minutos a 180º.


Dejamos enfriar y a desayunar!!!
Podéis endulzar vuestro café o infusión con el sirope de Agave... delicioso!!






Por dentro la canela se deshace en la boca!!



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