Sopa castellana de Cándido
Entre las estanterías de mi casa guardo multitud de libros de todo tipo. Me gustan los libros aunque se que están en vías de extinción, yo misma he sucumbido a la comodidad del ibook. Allí conviven libros de novela histórica (mis favoritos), con libros de aventuras, literatura clásica, novelas policiacas, enciclopedias y por supuesto libros de cocina.
Entre estos últimos tengo uno de pastas azules y hojas que perdieron su blancura hace ya muchos años y ahora lucen un color amarillento. Un libro llamado "La cocina de Cándido" y escrito por él mismo, Cándido López. Al verlo hoy, he pensado que tenía que meter al menos una receta de este libro en La cajita y como tenía en casa un excelente caldo de pollo de Casa Matachín, un caldo natural sin conservantes ni colorantes, he decidido que para un caldo clásico que mejor que un plato clásico como una sopa castellana.
Cándido era un famosos restaurador sergoviano que los que tenemos una edad recordamos bien. Mesonero mayor de Castilla abrió su restaurante a los pies del acueducto en una casona del siglo XV, donde hizo famoso su tostón segoviano que trinchaba a golpe de plato con gran maestría.
Pero además de ese plato, la cocina de Cándido preparaba deliciosos platos de la gastronomía castellana: potajes con judiones de La Granja, cangrejos de río, truchas, sopas de ajo y por supuesto la sopa castellana.
Esta última, tal y como nos cuenta el propio Cándido es así:
100 gr. de aceite o manteca de cerdo
100 gramos de jamón serrano picado
150 gr. de pan del día anterior en rebanadas (de hogaza a ser posible)
1 cucharada de pimentón dulce
3 dientes de ajo
6 huevos escalfados
1 litro de caldo de pollo Casa Matachín
unos granos de cominos
En una sartén se pone la manteca o el aceite y se añaden los ajos. (Yo usé ajos de Chinchón)
Cuando están ligeramente dorados se les agrega el jamón y las rebanadas de pan.
Se fríe durante dos minutos y se echa el pimentón. Se dora y agrega el caldo
luego se sazona y se vierte en seis cazuelitas de barro. (Yo lo dejé hacer 5' al fuego)
Se escalfan los huevos durante tres minutos en horno. (Como la sopa sólo la ibamos a tomar dos, escalfé los huevos en agua hirviendo. Serví la sopa en cazuelitas y puse el huevo encima)
Sirvase muy caliente. (Cándido)
Me gustan mucho las sopas, pero esta en particular es una de mis favoritas
Con el caldo natural Casa Matachín en pocos minutos pude disfrutar de ella
¿No os apetece una sopita para cenar?
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Madre mia que si me apetece esta sopica para cenar, y seguro que la gripe se marcharia del todo de casa, menuda maravilla me ha encantado. Un besazo
ResponderEliminarcosicasdulces.blogspot.com
Se ve exquisita! Un beso,
ResponderEliminarAdoro los platos de cuchara y esta sopa al igual que tú es de mis favoritas, pero hace siglos que no tomo una, bueno, no tanto... ¿verdad?
ResponderEliminarBesines
Nieves
Veo ésta receta y directamente el pensamiento se me va a la receta de mi madre y el recuerdo al sabor que tiene. Qué rica!
ResponderEliminarOs acabo de encontrar y aquí me quedo ;) me he hecho seguidora, no quiero perderme ninguna de vuestras nuevas publicaciones.
Besos
pues mira que no soy yo muy sopera,pero con ese huevecito humm se ve irresistible!
ResponderEliminarsaludos.
Esta sopa me encanta!!mi receta es casi igual, te ha quedado estupenda.
ResponderEliminarQue ricos y apetecibles los platos de cuchara
Bss
Patricia
Una sopita que te deja el cuerpo arreglaíto
ResponderEliminarBesitos
Suelo hacer la de un pueblo de Zamora, y la verdad es que cuando hace frio es lo mejor que se puede tomar, ahora me tomba un cuenco bien caliente, besos desde Madrid
ResponderEliminarUmh que sopita tan buena me gusta mucho :)
ResponderEliminarEstoy segurisima que esta sopa castellana esta deliciosa con ese caldito casero y el cariño que le pones de autentico lujo, por cierto tu pones la crema de orujo y yo txakoli, besitos
ResponderEliminarQue pinta tan rica, con su pan y su huevo :) esto resucita hasta a un muerto :)
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