"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

El rey Gambón - Pozuelo de Alarcón


Cómo casi todos los pueblos limítrofes con Madrid, Pozuelo de Alarcón, desde el siglo XVII se dedicaba básicamente al suministro de agricultura, ganado y curtidos de pieles a la capital. Pero desde finales del siglo XIX, se empezó a llenar de los llamados "hotelitos", casas unifamiliares, que algunos industriales y gente de la burguesía madrileña, construía para huir del calor de los meses de verano. 

En los años 70', como tantos pueblos de los alrededores de Madrid, Pozuelo pasó a ser una ciudad dormitorio o residencial. Se llenó de gente que trabajando en Madrid, buscaba un lugar más tranquilo donde vivir. Así llegué yo también hace 15 años. Adoro Madrid, y me gusta perderme por sus calles, pero en Pozuelo he encontrado también mi rincón, y aunque es un municipio independiente, yo siento que no he salido de mi ciudad. Paseando por Pozuelo veo la valla de la Casa de Campo y el skyline madrileño. ¡Estoy en casa!


La oferta gastronomica de Pozuelo es amplísima. Tenemos lugares estupendos para tapear y restaurantes con un amplísimo abanico de especialidades. Os dejo el enlace a la guia Pozuelo Gourmet. Sin embargo, lo que había echado de menos en estos años era un buen sitio para comer marisco. Esto se solucionó hace más de un año con la apertura de El Rey Gambón. 


Con un diseño moderno, nada más entrar nos encontramos un mostrador, en el que podemos apreciar el magnífico género que tienen y que podemos llevarnos a casa o consumirlo en el restaurante. Degustar unas ostras con champán en una de sus dos barras semicirculares es otra de las opciones que nos ofrecen, y por supuesto combinar el marisco con los platos de cocina de autor, en las mesas del restaurante.


 Buenos arroces, atún rojo a la plancha con tomate concassé o escalibada con tapenade, steak tartar de solomillo, de atún o de gambas sobre cama de tomate confitado...


Marisco cocido o a la plancha...


Y de postre podemos optar por un coulant de chocolate con helado de vainilla y toffe, tarta de queso, chocolate con espuma de queso y fruta de la pasión...



Y además, el precio es bastante razonable y se pueden conseguir descuentos adicionales en páginas como eltenedor.es

Bon Appétit
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