Chupito de lentejas con crujiente de jamón
Como ya os conté cuando preparé la Crema fría de lentejas de Samantha Vallejo-Nájera, en Nochevieja incorporo al menú de alguna forma las lentejas, siguiendo la costumbre que me transmitió mi hermana Carmen que durante 10 años vivió en Italia Allí tomar lentejas en Nochevieja trae buena suerte y yo para atraer a la buena suerte me quedo con todo: las lentejas, las uvas, el oro en la copa de cava o champagne, el entrar a la patacoja y la ropa interior de color rojo, je, je. Algún día me voy a tener que grabar en video para recordarlo ;)
Este año las lentejas han estado presentes en el aperitivo. Unos sencillos chupitos de lentejas adornados con una loncha crujiente de jamón, pero que quedaron muy vistosos.
Ingredientes:
300 gr. de lentejas (ya hidratadas)
2 patatas grandes
2 zanahorias
250 ml de nata líquida
1 vaso de leche
1 hueso de jamón
1 cucharadita de pimentón
Sal
Aceite
4 lonchas de jamón serrano
Pelamos, lavamos y cortamos las patatas en trozos gruesos y las rehogamos con aceite de oliva en la misma olla donde vamos a preparar las lentejas. Cortamos en medias rodajas la cebolla y las añadimos y pelamos las zanahorias y las cortamos en discos gruesos, poniendolas también en la olla.
Cuando la cebolla empiece a transparentar, añadimos el pimentón y rapidamente 1/2 litro de agua y el hueso de jamón. Por favor, de los buenos, de los que tengan "chicha", que hay puntas de jamón por ahí que da pena verlas.
Dejamos que vaya haciendose un buen caldo durante 20', e incorporamos las lentejas que previamente hemos tenido 3 ó 4 horas en remojo. Añadimos sal al gusto. Si el caldo no las cubre al menos 1 dedo por encima, añadimos un poquito más de agua y dejamos cocer a fuego lento o en la olla a presión. En esta última están listas en 10', a fuego lento necesitarán unos 20'.
Una vez preparadas las lentejas, sacamos la punta de jamón y ponemos el guiso en un robot de cocina. Procesamos hasta conseguir una textura de puré muy fino y añadimos la nata y un vaso de leche o un poco más, ya que necesitamos una cremita que se pueda beber.
Metemos la crema en la nevera y cuando vayamos a llevarla a la mesa, ponemos las lonchas de jamón entre dos papeles de hornear y las metemos en el microondas para conseguir que queden crujientes. Como el tiempo depende de la potencia del microondas, yo os aconsejo que pongaís primero un minuto y medio y miréis como están, luego vais probando de 30'' en 30'' hasta que las lonchas estén crujientes y se puedan romper con las manos. Servimos la crema en vasos de chupito, y los coronamos con un buen trozo de crujiente de jamón.
¡Y a la mesa con el resto de aperitivos!
Bon appétit Imprime esta receta Tweet