"Un lugar donde guardar el aroma que sale de los pucheros, una buena receta, la tarjeta de aquel restaurante que nos gustó tanto, la etiqueta de una botella de vino…"

La cajita de Nieves y Elena

Mousse de chocolate sobre crujiente de arroz


Hace unos días, Nieves y yo recibimos un regalo muy especial. se trataba de una caja de madera con una chapa con nuestro nombre. Venía directamente de Aix-en-Provence, del sur de Francia, y en su interior nos encontramos con unos maravillosos chocolates fabricados por Pascal Caffet, campeón del mundo chocolatero.


Cada uno de los chocholates que nos llegaron era especial. Cada uno aportaba en su interior unos sabores exquisitos. La firma zChocolat  envía sus chocolates a todo el mundo y los personaliza para que la persona que los reciba se sienta especial. Y así es como nos sentimos Nieves y yo, especiales.




Quería que mi familia probase estos chocolates, pero yo también quería que los probasen de una forma especial, así que decidí que servirían de complemento para una mouse de chocolate que había visto en el blog de María de "Cosicas dulces y alguna salada". Esta mouse me había llamado la atención porque según María era la mejor mouse de chocolate que había probado, así que sería un buen acompañamiento para los bombones.

Para hacer esta mouse todavía más especial, me decidí por un recipiente distinto, un recipiente que comestible, que había visto un par de veces. No recuerdo en donde lo había visto, y tampoco había apuntado como realizarlo, así que confié en la suerte para preparar mi recipiente crujiente de arroz.

Esto es lo que necesité:





Galletas de papel de arroz (una por comensal)
250 gr. de chocolate
150 gr. de nubes
50 gr. de mantequilla
60 ml. de agua hirviendo
300 ml. de nata para montar
1 sobrecito de azúcar avainillado
Unos chocolates  zChocolat  para decorar



Para el recipiente usé unas galletas de papel de arroz y una sartén muy pequeña, la que utilizo para freir huevos. En la sartén pequeña, ponemos aceite cubriendo todo el fondo, y cuando esté muy caliente, con mucho cuidado vamos friendo las galletas de papel de arroz, dandoles forma con dos tenedores de madera. Tenemos que hacerlo con cuidado para que no se nos rompa. Una vez fritas, las dejamos sobre un papel absorvente para que suelten la grasa y se enfrien.


Cortamos en tres o cuatro trozos cada nube con unas tijeras. Os recomiendo que untéis las tijeras con aceite de oliva para que no se peguen las nubes al cortarlas.

En un bol ponemos el chocolate troceado, las nubes, la mantequilla el azúcar avainillado y el agua y lo metemos 3' al microondas para que se funda todo, aunque lo sacamos al minuto y medio para dar unas vueltas y mezclar todo bien y luego terminamos de fundir.


María fundía todo en un cazo a fuego lento, pero yo prefiero la comodidad del microondas. Eso va en gustos.
Dejamos que la mezcla con el chocolate fundido se entibie un poco. Mientras tanto montamos la nata y la añadimos poco a poco al chocolate, procurando hacerlo con movimientos envolventes para que nos quede una textura esponjosa.




Ayudados de una cuchara, vamos rellenando los crujientes de arroz que teníamos reservados y los metemos en el frigorífico al menos durante 4 horas.

A la  hora de servir le añadimos unas láminas de almendra o una nube de nata montada.


Y acompañamos esta exquisita mouse con un bombón de  zChocolat t.


Si, si es pecado, ¿pero no os apetece caer en la tentación?


Solo un poquito


Lo sabía, feliz tentación



Bon Appétit Imprime esta receta